domingo, 6 de febrero de 2022

A ti me llevó Dios o la vida

Creado el 22 de agosto de 2021.

Editado y publicado el 06 de febrero de 2022.

 

Yo soy un pan de Dios sin lugar a duda.

Siempre trato de repetirme que no es un pecado que estés todo el tiempo en mi mente, si por algo apareciste en mis pensamientos amorosos dejaré que dure lo que tenga que durar, sin que esto sea una pérdida de tiempo.

Te confieso que nunca me había detenido a pensar tan a fondo de mis sentimientos para ti, y cuando empecé a hacerlo fue de lo más profundo que he vivido; de esas veces que la sangre se me sube a la cabeza y me pone la piel de gallina: chinita, chinita.

No sé si desde que te empecé a hablar diferente me enamore de ti, tal vez si, tal vez no, como sea pero es grato sentirme así, sentirte parte mi mientras la vida lo desee. Me acuerdo que las primeras charlas empezaron en plan amistoso, después ya te dije mi manera de pensar y aunque por cierto tiempo me acuerdo que te asuste, jeje, ahora que veo que fue divertido.

Por eso la lluvia y el corazón latiendo a mil por hora siempre me recuerdan a ti, a veces te pienso demasiado y no sé si hoy en día eso me haga daño, pero me pone feliz, feliz de recordarte, de que se me ilumine el rostro por saberte aquí, no tan cerca pero sí por donde yo me muevo día a día.

Aunque en ciertas ocasiones no parezca siempre me ha puesto feliz saber de ti, de tus días de vida, de tu cotidianidad, de tus hábitos y de todo lo que conlleve de ti…

He visto por televisión varias series, he leído por ahí más de una ocasión, me he formado un criterio, he observado por las redes y todo me lleva a lo mismo que mientras pueda te voy a tener en mis pensamientos y presente en mi vida, a veces incluso en mis pensamientos religiosos…

Si Dios permite, algún día el destino o la casualidad pondrá ese camino bonito que un día comenzamos, que un día quise conocer y que no me arrepiento de haber pretendido amar. Exacto, me sigo sintiendo así aun después de más de mil seiscientos días de estar más cerca que nunca de ti, cuando sepas de mí no olvides que tres minutos a día de mi vida son siempre tuyos.

La sinceridad la he enmarcado contigo porque el interés está presente y como he querido llamar esta primera parte Dios me concedió llegar hasta ti, hasta tu presencia. No sé qué nombre tenga esto lo que varias veces he llamado amor, a lo mejor sea pasión, sea éxtasis o sea decisión.

Creo que todos cuando somos niños queremos ya crecer para tener nuestra propia casa, un coche, pagar nuestras cosas y así, pero te digo algo hoy que soy adulto, joven pero al final de cuentas adulto uno de mis deseos es seguir sabiendo de ti, así poco o mucho pero saberte existente.

Nadie me había puesto en una vida así, aunque suene cursi amo a mi ser con sus ojitos pispiretos pensando en ti, en tus ojos, en tu corazón a veces tembloroso.

Que la vida nos depare más de una historia juntos, más de un capítulo de novela de amor.

Cuando tenga tus ojos en mi mirada estoy seguro que la voy a desviar…

Y sí confirmo: esto es para R.G., posiblemente por siempre R.G.